Durante la última década se han inventado una gran cantidad de aplicaciones (Slack, Zoom, Google Hangouts, G Suite, Office 365, Evernote, etc.) que permiten a los trabajadores hacer su trabajo sin tener que pisar la oficina.
Estas tecnologías nos permiten coeditar documentos, planificar e implementar proyectos, celebrar reuniones mediante videoconferencia e incluso firmar contratos confidenciales desde la comodidad de nuestro sofá.
Con toda esta tecnología a nuestro alcance, no es difícil imaginar un futuro en el que la mayor parte de nuestra vida laboral ya no tenga lugar en la oficina.
Pero, ¿qué tiene exactamente el teletrabajo que suena tan prometedor para el empleado, para las empresas y para la sociedad en general?
¿Qué tipo de cultura empresarial debe acompañar el uso de estas herramientas para el trabajo remoto?
¿Es el teletrabajo una buena estrategia empresarial para obtener y retener talento?
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Frente a las ciudades superpobladas y el crecimiento urbano insostenible, el teletrabajo se está convirtiendo en una visión cada vez más popular para un futuro sostenible.
Un 91% de los trabajadores remotos encuestados afirma que trabajar de forma remota es una buena opción para ellos. El 96% lo recomendaría a sus amigos.
«No ser visto en la oficina» actualmente afecta las posibilidades de ascenso de muchos trabajadores.
Los empleados hacen frente a este miedo involucrándose en lo que los investigadores llaman» tiempo cara a cara pasivo.